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TANDEM Luxury Travel

Eduard Puente en Six Senses Maldivas & Omán

Una experiencia distinta en un destino que, de por sí, ya cuenta con el lujo natural de un paraíso terrenal. 26 atolones y más de 1.000 islas forman lo que oficialmente se conoce como Islas Maldivas y que, popularmente, se le conoce como el cielo en la Tierra. Azules turquesa, blancos arenosos y paz, mucha paz. 

Un destino idílico que Eduard Puente, nuestro Asia & Oceania Travel Designer, ha tenido la oportunidad de disfrutar de la mano de la exclusiva firma Six Senses. La cadena ofrece dos de sus mejores experiencias en destino para aquellos que buscan tres cualidades indispensables: playa, buen clima y tiempo de calidad en un entorno de lujo.

Dos alojamientos que se han convertido en referencia en Maldivas. El atolón Laamu y el atolón Lhaviyani.  Dos propuestas que van más allá del destino y que han adaptado todo su contenido y funcionalidad a la naturaleza que les rodea. 

Six Senses Laamu

Al sureste de Las Maldivas, Laamu y los 82 islotes que la rodean te esperan para ofrecerte una experiencia en armonía con la naturaleza que va mucho más allá de las palmeras y las olas. Con villas terrestres y flotantes, habituales en Maldivas, Six Senses Laamu propone una estancia que te hará liberar todos tus sentidos.

A las actividades habituales que ofrece el destino y que tienen como protagonista las playas, el mar, los corales y los delfines se suma su propuesta mindfulness con yoga, con la naturaleza como protagonista. Todo bajo un proyecto que brilla por su sostenibilidad. 

La experiencia gastronómica empieza en sus dos restaurantes donde todo el producto es local y continúa con un complejo de emisiones cero. Bicicletas y energías renovables dan vida a todo el alojamiento que tiene distintos compromisos con el entorno que lo rodea para proteger su mayor activo: la vida marina. De hecho, Six Senses Laamu colabora con otras tres ONGs para proteger el entorno y sobre todo educar sobre la importancia de protegerlo para poder disfrutarlo. 

Six Senses Kanuhura

Es la otra estrella de Six Senses en Maldivas y ha sido, sin duda, la reinvención de unos de los atolones rey del país. Hogar de las mejores playas del archipiélago. Cuenta con tres islas privadas y 91 villas rodeadas de tortugas, delfines e infinidad de peces de colores que juegan entre los arrecifes. Un lugar donde hay tiempo para la desconexión y también para las experiencias personales y en familia. 

Un alojamiento que, como el resto de la firma, se ha focalizado en una misión solidaria para mantener intacto todo el espacio que le rodea. Cuenta con la presencia de las tortugas marinas del Índico y esa es su principal razón de ser: proteger la población de tortugas mientras investiga sus comportamientos en islas vecinas para facilitar su procreación y así velar por la continuidad de una especie vita para el ecosistema marino. 

Todo bajo un concepto pensado para que vuelvas a reconectar contigo física, mental y espiritualmente en un entorno donde sólo podrás encontrar la felicidad. Una isla en la que perderse literalmente. Un recinto pensado para moverse a pie por cada rincón que ofrece los mejores tratamientos wellness y spa de la zona. 

Extensión a Six Senses en Omán

De regreso a casa, y tras hacer escala en Dubai, Omán es uno de los destinos por descubrir este 2024 y Six Senses ya tiene todo previsto para que descubras una de las zonas más encantadoras de la región. 

En una ubicación excepcional, la península de Musandam, en Six Senses Zighy Bay las playas turquesas y las siluetas de palmeras se sustituyen por montañas escarpadas que protegen la playa dando ese aspecto salvaje a un destino casi virgen. 

El resort, que ofrece villas y suites con piscina privada, están inspirados en el pueblo nativo de la región en un lugar que ofrece tiempo y espacio para reencontrarse con uno mismo en plena naturaleza. Desconexión entre montañas con una propuesta gastronómica ecléctica que mezcla los sabores locales con aquellos platos internacionales. 

A todo ello, se suma un spa galardonado y una lista sin fin de experiencias incluso mucho antes de tu llegada. Uno de las favoritas es el parapente que, si se desea, el check in puede empezar desde lo alto aterrizando en el hotel en tu propio paracaídas. Una primera impresión perfecta para ver desde lo más alto los mares que rodean el complejo donde el snorkeling es must en este destino.

Una experiencia inmersiva en un hotel totalmente ecosostenible que se mimetiza a la perfección con su entorno árido y húmedo a partes iguales. Un destino que también cuenta con el compromiso con el medio ambiente de Six Senses, con un proyecto diseñado para reducir los deshechos y preservar los océanos, así como, fomentar la educación autóctona de la zona, los Dibba.

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